Piel con piel, un método que establece un vínculo entre los padres y el recién nacido
Enfermería del área de neonatos del Hospital Universitari General de Catalunya promueve entre sus pacientes el Método Canguro (MC), una técnica eficaz que permite cubrir las necesidades del bebé en materia de calor, lactancia materna, protección frente a infecciones, estimulación, seguridad y amor,... El Método Canguro es la atención a los niños recién nacidos manteniéndolos en contacto piel a piel con su madre. Se trata de un método eficaz y fácil de aplicar que fomenta la salud y el bienestar tanto de los recién nacidos prematuros como de los nacidos a término.
Los primeros en presentar este método fueron los doctores Rey y Martínez en Bogotá, Colombia, donde se desarrolló como alternativa a los cuidados en incubadora, inadecuados e insuficientes, dispensados a recién nacidos prematuros que habían superado dificultades iniciales y que necesitaban únicamente alimentarse y crecer. Casi dos décadas de aplicación e investigación han dejado claro que el MC constituye algo más que una alternativa a los cuidados en incubadora. Se ha puesto de manifiesto que el MC repercute eficazmente en el control de la temperatura, la lactancia materna y el desarrollo de vínculos afectivos referidos a todos los neonatos, al margen de su entorno, peso, edad gestacional y situación clínica.
Los vínculos afectivos entre los padres y el bebé
El rol de los padres de un recién nacido es muy importante y sus cuidados contribuyen a establecer un vínculo afectivo duradero entre padres e hijos. Para crecer de una manera saludable es necesario cubrir sus necesidades fisiológicas; alimento, higiene, cambio de pañal...
así como establecer un contacto y vínculo afectivo durante los primeros años de vida. El método canguro estrecha ese vínculo con el recién nacido debido al contacto piel con piel, el olor, las caricias, los sonidos, las miradas, las sonrisas…
Ventajas del Método Canguro para el bebé y para los papás
El método canguro es la forma de establecer el contacto piel a piel entre los padres y el recién nacido. Este tipo de contacto es muy enriquecedor para ambos ya que ayuda a aprender a manejar al bebé, a perder el miedo a cogerlo, a conocerlo y a generar un nexo de unión.
El Método Canguro ofrece una regulación térmica estable, facilita la producción de leche de la madre al estar en contacto permanente con el bebé, favorece que el bebé aumente de peso más rápidamente, que presente menos infecciones y así pueda tener una menor estancia hospitalaria.
Además la posición del bebé en el Método Canguro le ayuda a respirar mejor, a regular mejor la temperatura y a tolerar bien la alimentación.
El Método Canguro también tiene beneficios para los padres ya que el contacto físico facilita el reconocimiento del recién nacido como hijo propio. Aumenta el sentimiento de competencia en el cuidado, disminuye el sentimiento de ansiedad y angustia, e integra al bebé en el núcleo familiar.
Cómo colocarse para el Método Canguro
En el Método Canguro se coloca al bebé sobre el pecho desnudo de los padres para mantener un contacto continuo piel con piel. En la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales de Hospital Universitari General de Catalunya, las enfermeras ayudarán a los padres a colocar al bebé en el pecho, en forma vertical con los brazos abiertos, con la cabeza girada para un lado y un poco hiperextendida para que pueda respirar mejor y poder verle la cara. Una vez, estén ambos cómodos, cubrirán al bebé con un arrullo para disfrutar del momento.
Es posible que durante los primeros minutos tarden ambos en acomodarse, después, poco a poco el bebé se irá durmiendo y se relajará. Se recomienda un mínimo de 90 minutos para cada sesión.
¿Qué necesita el bebé para el Método Canguro?
Un gorro
Un arrullo
Un chupete
¿Cómo sabrán los padres que al bebé le gusta el Método Canguro?
Los padres comprobarán que se encuentra cómodo, que sonríe, que mantiene las manos abiertas y que duerme tranquilo.