Osteopatía Pediátrica: una terapia altamente recomendable en niños y adolescentes
El Hospital Universitari General de Catalunya dispone de una unidad de Osteopatía Pediátrica, vinculada al Servicio de Pediatría, para el tratamiento de diversas disfuncionesen niños desde su nacimiento hasta la adolescencia. Se trata de un procedimiento que goza de una gran aceptación en el Hospital.
La osteopatía infantil es un procedimiento terapéutico manual no invasivo indicado para tratar alteraciones de todo tipo: craneales (cefaleas, plagiocefalias...), digestivas (cólicos lactantes, reflujo Ge, estreñimiento...), respiratorias (sinusitis, bronquitis de repetición...), musculoesqueléticas (asimetrías de columna y extremidades, dolores musculares y articulares...), entre otros. En el caso de los bebés esta técnica es adecuada para el tratamiento de los problemas de succión, los cólicos o gases, la irritabilidad y las dificultades para dormir, entre otros. La osteopatía actúa sobre las causas de la disfunción y no únicamente sobre sus síntomas.
La osteopatía tiene un enfoque del individuo como unidad, de manera que todas las partes y
sistemas del cuerpo están interrelacionadas. No sólo se trata la zona sintomática que presenta el paciente, los osteópatas trabajan para identificar la lesión primaria, la causa de aquel síntoma, y restablecer el buen funcionamiento del cuerpo.
El osteópata lleva a cabo una evaluación exhaustiva del paciente revisando el historial y realizando un examen clínico. A raíz de este, la clave está en descubrir la estructura afectada y establecer el diagnóstico y tratamiento sobre la lesión primaria, restableciendo su función.
El trabajo del osteópata en bebés y niños consiste en la utilización de técnicas indirectas con micromovimientos, técnicas manuales suaves, actuando sobre las tensiones de los tejidos, tendones, fluidos corporales, membranas,... respetando el momento de crecimiento de cada niño y sus necesidades.
La osteopatía es una disciplina terapéutica desarrollada en Estados Unidos de la mano del Dr. Andrew Taylor Still a finales del siglo XIX con el objetivo de entender cómo se producen las enfermedades, después de que el doctor perdiera a tres de sus hijos y su mujer a causa de una patología. El Dr. Still creó los principios de esta medicina holística basada en las interrelaciones de los diferentes sistemas del cuerpo, la relación entre la función y estructura y la importancia de la vascularización y drenaje de los tejidos para la salud del cuerpo.