La apendicitis
La apendicitis es una inflamación del apéndice, un tubo cerrado de un extremo que se proyecta desde el intestino grueso en el lado inferior derecho del abdomen, causada principalmente por el bloqueo del apéndice por heces, un cuerpo extraño o un tumor. Desde el Hospital Universitari General de Catalunya nos explican los síntomas y tratamientos de esta enfermedad.
Esta enfermedad es más común en pacientes de entre 10 y 30 años, aunque puede suceder a cualquier edad. El síntoma más característico es dolor en la parte inferior derecha del abdomen y que inicialmente puede presentarse alrededor del ombligo o en la zona epigástrica; que empeora al toser, realizar movimientos bruscos o caminar. La apendicitis también suele provocar náuseas, vómitos, pérdida del apetito, febrícula y en casos más avanzados fiebre alta.
Es importante acudir al médico en caso de presentar cualquiera de estos síntomas si se prolongas más allá de 24h, ya que la apendicitis no tratada a tiempo puede causar graves complicaciones. Normalmente el tratamiento es quirúrgico (en algún caso, si la apendicitis está muy evolucionada, se trata inicialmente con antibióticos) y si no hay contraindicación se realiza por laparoscopia (cirugía mínimamente invasiva). Según los hallazgos quirúrgicos precisará de tratamiento antibiótico posterior.
Una vez realizada la cirugía, es necesario esperar unas semanas para reanudar una actividad física plena (deporte, esfuerzos) para evitar las hernias en las incisiones abdominales realizadas. Existen una serie de consejos para sobrellevar esta recuperación entre los que se encuentran evitar realizar ejercicio físico durante el tiempo que el médico recomiende; sostener el abdomen al toser, reír o moverse para reducir el dolor; adecuar la vuelta al trabajo o escuela según avance la recuperación y acudir al médico en los controles programados o si aparecen complicaciones (fiebre, dolor que no calma con analgesia…). Tras la extirpación del apéndice, los más frecuente es que el paciente no precise controles a largo plazo, pero esto siempre se debe individualizar en función del caso.