Es conocido el incremento de las enfermedades alérgicas en el mundo pediátrico, en el que el asma infantil de causa alérgica ocupa el primer lugar en el ranking de las enfermedades crónicas infantiles, afectando a 8/9 de cada 100 niños. El aumento de las alergias está considerado por varios autores como la epidemia del siglo XXI.

El Hospital Universitari General de Catalunya dispone de un servicio de alergias pediátricas, liderado por el Dr. Enric Martí y formado por especialistas tanto en pediatría como en alergología, lo que aporta a los pacientes un indudable beneficio en el manejo de enfermedades alérgicas tales como rinitis, conjuntivitis, asma, urticaria, dermatitis atópica, alergias alimentarias y medicamentosas, entre otras.

Ya está aquí la primavera y, además de alterar la sangre (según el dicho popular), hará su aparición de forma contundente para aquellos niños y niñas que padecen alergias. Hemos disfrutado de un invierno con temperaturas suaves. Entramos en la estación, en la que una gran parte de plantas y árboles tienen su época de floración, esparciendo el polen, en que es frecuente la aparición de rinitis, conjuntivitis, crisis asmáticas de origen alérgico y episodios de asma-broncoespasmo.

De hecho, los más madrugadores son los cipreses que empiezan la polinización de octubre a marzo. Después vienen los plataneros marzo-abril; las gramíneas silvestres y de cultivo y los olivos en mayo-junio y entre marzo y octubre una mala hierba que se denomina Parietaria y crece en muros y paredes.

La medida más eficaz para disminuir la clínica alérgica en estos casos es disminuir la interacción con aquello que la provoca. Como medidas generales desde la Asociación Española de Pediatría se hacen estas recomendaciones:

  1. No abrir las ventanas al amanecer ni al anochecer.
  2. En época de floración, evitar ir a zonas donde haya plantas a las que el niño es alérgico.
  3. Tender la ropa en el interior de las casas.
  4. Cambiarse de ropa al volver a casa.
  5. Emplear gafas de sol para el polen.
  6. Emplear filtros para el polen en los aires acondicionados del domicilio y los coches.
  7. Viajar en coche con las ventanillas subidas.
  8. Evitar las actividades al aire libre a primera y última hora del día

Ahora bien, entre las causas más frecuentes de alergia respiratoria se encuentran los ácaros del polvo doméstico que se reproducen en otoño y en primavera, momento en el que hay rebrotes de rinitis y asma en los niños alérgicos.

En el mundo infantil las alergias alimentarias, preferentemente a la leche de vaca, huevo, pescado, frutas y frutos secos copan una gran parte del porcentaje de consultas y pueden aparecer en cualquier época del año al igual que las alergias a los medicamentos o las producidas por los animales domésticos, siendo presentes los 365 días.

FALSOS MITOS EN LAS PRUEBAS DE ALERGIA

  • No se hacen pruebas alérgicas en niños pequeños: FALSO. Se pueden hacer a cualquier edad. Es un hecho comprobado la positividad de las pruebas cutáneas en niños de pocas semanas cuando se sospecha de una alergia a las proteínas de la leche de vaca, después de la lactancia materna.
  • Son dolorosas: FALSO. Tenemos la grata experiencia de realizar pruebas en lactantes y sonríen mientras las realizamos. Si se utilizan lancetas apropiadas el proceso es absolutamente indoloro.
  • Retrasar los estudios porque hará un cambio y desaparecerán los síntomas: FALSO. Ciertos síntomas NO alérgicos, propiciados por la inmadurez del niño no volverán a aparecer. Pero si la base de la patología es una alergia, una alteración del sistema inmunológico, los síntomas irán in crescendo, y el proceso tenderá a la cronicidad.